A través de un contenedor para pájaros (pomos, cajas ahuecadas, jaulas) se puede entrever la orni-cultura en San Miguel del Padrón, La Habana, Cuba. El ir y venir de criadores, vendedores y curiosos es una muestra de un proceso local colaborativo, de un sistema de relaciones de intercambio + iniciativa ciudadana. Es un extenso entramado de prácticas y practicantes, organizados al margen de las instituciones y unidos por la pasión (pasión por los trinos, por el vuelo).